¿Cómo funciona y para qué sirve?

Es mucho más que un lifting energético, es un proceso corporal que activa más de 30 puntos de  energía en el cuerpo, permitiendo que libere toda la incomodidad, intensidad y contracción que está teniendo y que no le permite recibir, acelerando las capacidades curativas naturales de tu cuerpo.

Es un toque sutil y tranquilizante que se aplica en cuello y cara, y funciona en todas las células de tu cuerpo, para restaurarlo, aliviarlo y rejuvenecerlo.

Cada vez que te miras en el espejo y te juzgas, las células recuerdan y atoran ese juicio en ellas. El Facelift energético borra la memoria celular del juicio y rejuvenece al cuerpo y al ser.

Es un tratamiento energético no invasivo, que difiere de otras alternativas en que es más suave, más amable y más fácil para ti y para tu cuerpo. Sin agujas, sin pastillas, cremas agresivas o efectos secundarios.

Las personas que lo han recibido han notado cambios como más luz y luminosidad en el rostro, elasticidad en la piel, claridad en los ojos, brillo en el cabello, levantamiento de busto y glúteos, aumento de energía y aumento de relajación.

Hay casos documentados en la web oficial de Access Consciousness de corrección de los efectos de parálisis facial

¿Cómo es una sesión de Facelift?

El tratamiento empieza como una sesión de Barras. Primero movemos la energía del cuerpo, para que esté abierto a recibir.

Después se aplican las Barras de los implantes distractores, como son los miedos, vergüenzas, culpas, prejuicios, etc. Y luego se empieza por los movimientos y posiciones de Facelift en escote, pecho, cuello, cara y cuero cabelludo.

Aunque el área de acción sea éste, los beneficios se reciben en todo el cuerpo. Se cierra la sesión al igual que con las Barras, con la restructuración de cuerpo, para sellar todos los beneficios de la sesión.

La duración de la sesión es de unos 45-60 minutos.